Un día como hoy, pero en el año 2020 el astro argentino partía a otro mundo. Hecho que generó repercusión no solo en el mundo del futbol.
Por Francisco Tejero// Había cumplido hace poco 60 años y ya no se lo veía bien. La ultima vez que estuvo en un estadio fue en el partido de Gimnasia, equipo que dirigía en ese momento ante San Lorenzo. Fue igualdad 0-0 en el partido amistoso, pero a Diego no se lo vio bien. Y en un estadio con gente, fue en la Bombonera en marzo de este año cuando el club de la rivera venció al de la plata y con el empate de River se quedó con la Liga Argentina.
El dos de noviembre de ese mismo año debió intervenirse quirúrgicamente por un hematoma subdural. Operación que duró mas de una hora y estuvo a cargo de Leopoldo Luque quien supo ser su médico personal.
Lo cierto es que Diego lidiaba todavía con algunas adicciones, el alcohol, las pastillas para poder dormir afectaron muy fervientemente a su sistema. Esto ultimo se puede comparar con la vida que fue teniendo a lo largo de su carrera futbolística.
Cuando falleció, se decretaron tres días de feriado nacional en nuestro país y una multitud de personas se reunieron entre la tarde del 25 y la mañana del 26 para darle su último adiós. Era tan grande el fervor que se realizaron actos macabros como por ejemplo, sacarse fotos con el cadáver, acción que trajo a la condena social por parte de sus fanáticos.
Mas allá de haber ganado un mundial, un Scudetto con el Napoli, formar parte de este histórico Boca del campeonato Metropolitano de 1981. Maradona no es una persona cualquiera, es un hombre pegado a una pelota de cuero, pelota de la cual no se despegó hasta la muerte.