El caos no termina y la derrota con Huracán el domingo generó la locura en Vélez, que parece no encontrarle vuelta a esta difícil situación. Ahora se le suma la posible renuncia de uno de sus dirigentes.
Por Pedro Vanzini // Parecía que con la llegada de Sebastián Méndez el fortín lograría salir del pozo en el que se encuentra, ya que había logrado 2 victorias seguidas frente a Arsenal y Lanus, no fue así. El equipo comenzó a empatar y las derrotas contra San Martin de San Juan por Copa Argentina y también con Huracán en lo que fue la última fecha de la Liga Profesional (que lo dejo a dos puntos del descenso), originó el enojo por parte de los hinchas.
Por un lado, los jugadores fueron agredidos en las afueras de la Villa Olímpica por los barras, luego del partido con Huracán. Los afectados que salieron a hablar fueron Gianluca Prestianni y Leonardo Jara, en dónde dicen que se los agredieron a golpes de puño e inclusive llegaron a amenazar de pegarle dos tirós al ex Boca. Pero esto solo fue el comienzo de un lunes de frenesí en el conjunto de Liniers.
A esto se le sumó una convocatoria de socios a las afueras del club, en dónde demostraban todo su descontento ante la gestión actual de Sergio Rapisarda y las malas actuaciones del equipo en estos últimos campeonatos. Recordemos que Vélez quedó en 25° y en el anterior torneo 26°.
Ante esto, varios jugadores pidieron irse, como es el caso de Francisco Ortega y del juvenil Prestianni. También se habló de una posible renuncia de Méndez, todo en un momento en el que asimismo se habla de una posible renuncia de Rapisarda como presidente del club.
Ante esta situación, Vélez encarará la Copa de la Liga, en donde serán 14 finales para safar del descenso, con un mercado de pases que será clave para ayudar al equipo en esta misión.