Mariana Peña es rescatista independiente de animales del partido de Ituzaingó, nos cuenta su labor en cuarentena, dedicación y compromiso con esta causa, además de las distintas complicaciones que surgieron a raíz del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio. Con gran emoción expresa lo que los animales significan para ella y el amor que les tiene.
Por: Rocío Carrizo / Sus redes plagadas de animales y su vida llena de historias donde los protagonistas tienen cuatro patas, Mariana Peña ciudadana del partido de Ituzaingó, amó y cuidó su vida entera a los animales. Se dedica plenamente a la protección y rescate de estos, hace más de 15 años. Esta rescatista independiente es dueña de 11 animales propios, pero su casa es un lugar de tránsito para todo animal que necesite de su ayuda.
La labor de los rescatistas de animales se ha complejizado en gran medida. Desde las restricciones en la circulación, el aumento de precios de los productos esenciales para los animales, sumado el impedimento para realizar campañas de castraciones debido al Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio, son algunos de los obstáculos que los rescatistas/proteccionistas del país y hasta del mundo están enfrentado hoy.
“Siento que tanto sacrificio de tantos años, se está yendo para atrás” expresaba Mariana, mientras nos contaba el aumento de los casos de perros/gatos en situación de calle. La gran cantidad de perras/gatas preñadas, cachorros tanto de perros como de gatos nacidos en las calles y hasta abandonos por mudanzas o por falta de presupuesto para poder mantenerlos, son los eventos que se están visualizando de manera explosiva en medio de la pandemia.
Pero el problema económico no es el único. Las restricciones de circulación traen consigo una serie de trabas, no solo a la hora de poder trasladarse para asistir a un animal ante una “alerta”, sino también a la hora de que se produzcan los encuentros con los adoptantes, esto ha generado tardanza en las adopciones y hasta algunas no han podido llegar a concretarse.
Mariana nos menciona la importancia de la castración, justamente para evitar la propagación masiva, que deriva en animales en situación de calle. Se cree que 8 de cada 10 cachorros nunca encuentran un hogar, un número lamentable que en manos de todos se puede revertir a través de las castraciones, el compromiso y la adopción. “La única manera de controlar la propagación de los animales en la calle es la castración” expresó.
En Ituzaingó, Zoonosis, ofrece de manera gratuita acceso a atención primaria, vacunaciones y castraciones para animales. Pero debido a la situación actual, sus actividades se mantienen momentáneamente paralizadas. Mariana no pertenece a esta entidad, pero nos cuenta que con mucho esfuerzo y dedicación, entre vecinos, rescatistas y proteccionistas y gente que trabaja en Zoonisis, se logrò sacar adelante para convirtiéndolo en un centro de gran ayuda en nuestro departamento.
Para esta proteccionista independiente, la vida animal es uno de sus grandes tesoros. “Ojalá pudiera darles mucho más de lo que les doy” dice Mariana con una mueca de emoción en su voz. El amor y la dedicación que le da al cuidado de los animales, la lleva a gastar plata de su bolsillo para el bienestar de estos. Recibe donaciones de todo tipo, menos de dinero. Todo lo que sea alimento, piedras sanitarias, insumos médicos, mantas, collares, etc, es bienvenido y muy bien utilizado.
“No podemos salvar a todos, pero si todos podemos salvar a uno” expresó. Además agrego: “Cuando uno adopta no es para toda nuestra vida, pero si para toda la vida de ese animal” haciendo referencia a la importancia del compromiso que uno debe asumir a la hora de adoptar un animal.
